"Cartuchos" de carne picada

Llevaba algún tiempo queriendo preparar algún plato con pasta filo, pero nunca me acordaba de comprarla cuando iba al supermercado. Hace unos días me hice finalmente con una caja y me dispuse felizmente a preparar algo a modo de toma de contacto. Lo cierto es que, atendiendo al principio de la navaja de Ockham, me fui directamente por la más sencilla de mis posibilidades echando mano de una bandeja de carne picada que tenía en el congelador y de algunas verduras para acabar de completar el relleno.

Ingredientes (para dos personas)

• Pasta filo
• Unos 300 gr de carne picada (de cerdo en este caso)
• 1 cebolla
• 1 pimiento rojo
• Mantequilla
• Nuez moscada
• Perejil
• Aceite 
• Un diente de ajo

Elaboración

1. Poner a precalentar el horno a unos 180º.
2. Picar el ajo y la mitad de la cebolla y pocharlas en una sartén con un poco de aceite.
3. Apenas empiecen a dorarse, añadir la carne picada con una pizca de nuez moscada y bastante perejil, removiendo a fuego vivo para que se haga de forma homogénea.
4. Mientras, cortar en trocitos el pimiento y el resto de la cebolla.
5. Una vez hecha la carne, reservarla, y en la misma sartén cocinar las verduras.
6. Cocinadas las verduras, agregar la carne a las verduras y mezclarlo todo.
7. Preparar cuatro láminas de pasta, según las indicaciones del fabricante (en mi caso, untadas con mantequilla), y hacer unos cartuchos (o paquetitos o rollitos, según el gusto) con la carne en el interior.
8. Introducirlos en el horno en una bandeja hasta que la pasta adquiera un color dorado.

Por cierto, dado que la bandeja de carne picada era de más de medio quilo, con lo que sobró de esta receta improvisé al día siguiente otra. Pero eso lo dejo ya para otra entrada del blog.